Empezamos a salir de casa. Empezamos la nueva normalidad. Podemos construir otra economía y otra forma de relacionarnos entre las personas y con el planeta. Hagámoslo posible.
El sol como atractor turístico
Nuestro país es conocido por el sol, el principal atractor turísitico de nuestro país. Las playas son un reclamo de miles de turistas al año. El sector representaba el 12% del producto interior bruto de 2018 y en las últimas semanas se ha podido apreciar la importancia que tiene a pesar de los riesgos que supone en cuanto a salud pública en un contexto de pandemia mundial. Hay que reactivar la economía, y en España, eso significa que hay que reactivar el turismo. Mientras algunas abrazamos con mascarilla y guantes a nuestros padres, solo EasyJet, empresa que se encuentra entre las diez más contamientantes a nivel europeo y la primera aerolínea en emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, anuncia que fletará, a partir del 1 de julio, 1000 vuelos al día a zonas costeras españolas, por una media de 30 euros. El cambio climático nos sale muy barato.
El turismo es un sector que se caracteriza por una alta temporalidad, precariedad y explotación laboral. Según el Estudio Impacto Económico del Turismo Impactur Canarias 2018, el turismo genera en la región un 40% del empleo total, asimismo es la segunda comunidad autónoma en riesgo de pobreza, con un 32% de la población. El caso de las Kellys, las camareras de hotel que se han organizado para denunciar su situación laboral, es el más conocido, por no el único.
El sol es un elemento fundamental para proteger el planeta y generar puestos de trabajo estables y dignos
El litoral español ha sido siempre supeditado a las necesidades del sector turístico. En el informe Banderas Negras de 2019, Ecologistas en Acción hace un análisis de aquellos proyectos y prácticas que más amenazan nuestro litoral. Existen casos denunciados de vertidos de aguas residuales y mala depuración, construcciones en zonas protegidas, acumulación de basuras, zonas industriales en costas, sobreexplotación por la presencia de cruceros. Los ecologistas denuncian que “el turismo no protege la vida submarina ni la biodiversidad. La acidificación por emisiones del transporte en el suelo y el mar, el calentamiento al que también contribuye, la alteración de los ecosistemas en esa búsqueda incesante de nuevas experiencias, las 14.000 toneladas de crema solar llena de tóxicos en los océanos, la destrucción del litoral para la construcción de alojamientos e infraestructuras son solo algunos ejemplos”.
Es, además, un sector que expulsa de los barrios a sus habitantes, acelerando los procesos de gentrificación y la subida de los precios de las viviendas. El alquiler de pisos turísticos se está conviertiendo en un grave problema de acceso a la vivienda en ciudades como Madrid, Barcelona o Málaga.
El sol para cuidar el planeta y generar empleo de calidad
Frente a esto Ecooo defiende que el sol es un elemento fundamental para proteger el planeta y generar puestos de trabajo estables y dignos. La energía solar fotovoltaica es limpia y renovable. Las renovables son energías que no emite gases de efecto invernadero a la atmósfera y es un sector puntero que se sitúa en la principal de las prioridades para luchar contra el cambio climático. En el último informe de mayo 2020 de Red Eléctrica Española la contribución de las renovables al conjunto de la producción peninsular fue de 54,4%. La presencia de renovables en la estructura de generación en nuestro país se ha incrementado 11 puntos porcentuales respecto de mayo 2019. Asimismo, el 73,8% de la generación peninsular estuvo libre de CO2, 9,4 puntos porcentuales más que mayo de 2019. Las emisiones de CO2 a la atmósfera se han reducido un 34,5% respecto del mismo mes del año anterior.
Marquemos la diferencia en empleo de calidad y cuidado del planeta, no en precariedad y explotación del litoral. Usemos el sol para cuidar la tierra.
Al ser la generación de energía una actividad constante, el empleo que genera es estable. El sector abarca desde perfiles técnicos a titulaciones superiores como ingeniería. Asimismo, el Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables en España del año 2018 publicado por la Asociación de Empresas de Energías Renovables, afirman que “gracias al impacto en la generación eléctrica, energía térmica y los biocarburantes, el Sector de las Energías Renovables evitó en 2018 la importación de 20.732.240 toneladas equivalentes de petróleo (tep) de combustibles fósiles, que generó un ahorro económico equivalente de 8.547 millones de euros”.
Nuestro país tiene la base material en recursos energéticos – somos el país con más horas de sol de toda la Unión Europea – y personas en disposición de trabajar como para situarse a la cabeza de la revolución solar. Marquemos la diferencia en empleo de calidad y cuidado del planeta, no en precariedad y explotación del litoral. Usemos el sol para cuidar la tierra.